Esta es la cara que se les ha quedado a los directivos de la cadena amiga cuando ha visto que OT, unos de sus buques insignia, se hunde por momentos. Tras recaudar minimos históricos en esta, su nonagésimo cuarta edición, cambiar el reality de día de emisión para reactivar a la audiencia, sin conseguir gran cosa y sacar la artillería pesada, el SEXO, como venimos diciendo, y además homoerótico.
Finalmente, como ni esto ha surgido efecto, lo cadena amiga ha decidido adelantar la final como unos 2 meses a su fecha original, y acabar así con este desastre.
Un minúto de silencio por todos aquellos realities que pasan a mejor vida.
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